Bienvenidos a un viaje fascinante a través del simbolismo, significado y la magia que envuelven al árbol de abeto. Aunque comúnmente lo asociamos con la decoración navideña, este árbol tiene una historia rica y profunda en diversas culturas. En este artículo, exploraremos más allá de su papel como árbol de Navidad y descubriremos las conexiones espirituales y místicas que lo han convertido en un símbolo de vida eterna, espiritualidad y elevación a lo largo de los siglos. ¡Acompáñame para desentrañar los misterios, significado, simbolismo y usos mágicos del árbol de abeto!
Simbolismo Espiritual del árbol de Abeto
Espiritualmente simboliza un fuerte vínculo con lo femenino, su perennidad y la capacidad de reproducirse espontáneamente, con la Luna, protectora de las mujeres durante el parto y el nacimiento. También el abeto representa la luz divina de Jesús que descendió a la Tierra.
La estructura del propio árbol evoca sus ramas extendidas, cual largos brazos que descienden con la finalidad de resguardar lo que yace debajo. De manera similar, antiguamente se sostenía la creencia de que los niños afectados por problemas de salud deberían descansar bajo las sombras de los imponentes abetos. Esta arraigada tradición se encuentra en consonancia con hallazgos científicos que respaldan las propiedades beneficiosas del abeto para niños que presentan retraso en el crecimiento y fragilidad ósea.
Orígenes del Abeto
Según la mitología romana, una ninfa sedujo al pastor Attis, amante de la diosa Cibeles, y por ello Cibeles convirtió a Attis en abeto.
Eurípides relata en “Las Bacantes” que las Furias del bosque se calmaban sobre ramas de abeto después de las orgías. Las Furias eran criaturas de la mitología griega que aplicaban el castigo divino a los culpables de malas acciones.
En la Antigua Grecia, el abeto estaba consagrado a Artemisa, la diosa lunar, al igual que el Caballo de Troya, construido con madera de abeto. El abeto desempeñaba un papel significativo en un rito primaveral dedicado a la Gran Madre. Hombres desnudos lo erigían en la plaza central y, con mazos, golpeaban una representación de la Madre Tierra para liberar el espíritu del nuevo año.
Para los celtas, el abeto simboliza la vida eterna e inmortalidad. El abeto plateado representaba el árbol del nacimiento, y quemaban sus agujas para bendecir a la madre y al niño luego del parto.
Druantia, una deidad celta, personifica la conexión con los árboles, particularmente con los abetos, y ejerce su influencia como un arquetipo de diosa eterna, reflejado en los árboles de hoja perenne. Reconocida como la madre de todos los árboles del calendario, su presencia simboliza la protección y la vitalidad constante que se manifiesta en estos majestuosos seres arbóreos.
Tanto el abeto como el abedul, en el norte de Asia, eran venerados como árboles cósmicos y utilizados en celebraciones conocidas como “árboles de mayo”. Estos árboles se adornaban con flores, simbolizando la presencia de la Diosa.
En la región de Saboya, el abeto tenía la capacidad de contrarrestar el mal de ojo y servir como salvaguarda contra los rayos. Esta creencia llevaba consigo la práctica de cortar la parte superior del árbol, configurando sus ramas de manera que evocaran los cinco dedos de una mano abierta, simbolizando así una señal protectora. La cifra cinco también ostentaba un significado sagrado asociado a la veneración de la Diosa.
Simbolismo del Árbol de Navidad asociado al Abeto
Si bien el símbolo mas conocido asociado al abeto es árbol de Navidad por su altura y sus hojas perennes lo convierten en un símbolo de la vida eterna, la espiritualidad y la elevación.
Antes del cristianismo, el abeto se relacionaba con el Sol y durante la celebración navideña, en el solsticio de invierno, se decoraba con dulces, frutas, regalos y velas que representaban rayos solares.
Con el tiempo, estas decoraciones adquirieron interpretaciones cristianas. Las velas simbolizaban la luz de Cristo, los frutos dorados y los regalos eran emblemas de la vida espiritual y el amor que Cristo ofrecía. El tronco de Navidad, encendido en Nochebuena y confeccionado con abeto, se reservaba para ser consumido únicamente en la Epifanía y se consideraba que su ceniza tenía propiedades protectoras.
En Alemania, en Nochebuena, se colocan ramas de abeto en las puertas para proteger sus hogares.
Historia del Árbol de Navidad
El origen del árbol de Navidad se remonta a la Edad Media y se cree que proviene de una adaptación del árbol de la vida o Yggdrasil de la mitología nórdica. Este árbol, representado por un fresno, era utilizado para conmemorar el nacimiento del dios Frey, dios principal de la fertilidad en la mitología nórdica, en fechas similares a las celebraciones actuales de la Navidad. Frey tenía un rol destacado para la sociedad agrícola de la época vikinga en Escandinavia, ya que estaba asociado con las cosechas, el sol, la lluvia, la virilidad, las bodas y la riqueza.
Aunque hay varias leyendas sobre su origen, la tradición cristiana atribuye a San Bonifacio la plantación de un abeto en lugar de un fresno gigante llamado Yggdrasil. Este acto simboliza el amor eterno de Dios, y las velas encendidas en el árbol representan la purificación y la luz de Cristo.
Otra leyenda sugiere que San Bonifacio derribó un roble, llevándose consigo todos los árboles excepto un pequeño abeto llamado “árbol del Niño Dios”, cuya forma triangular simboliza la Santísima Trinidad.
Significado de los elementos del árbol de Navidad
¿Te preguntaste por qué la decoración del árbol de Navidad incluye adornos significativos? Estos elementos resaltan la esencia de la celebración. La estrella que se coloca en la cúspide simboliza la guía hacia Jesucristo. Con el tiempo, las manzanas y las velas se transformaron en bolas y luces de colores. Las bolas simbolizan los dones de Dios mientras que las luces representan la luz que trajo al mundo. Las guirnaldas o lazos reflejan la unión familiar y la alegría.
Las piñas representan los frutos del árbol, y los diversos adornos, como campanas, lágrimas de cristal o juguetes, añaden un toque personal. Los regalos bajo el árbol tienen un profundo significado cristiano, recordando que todas las bendiciones provienen de Jesucristo, el árbol de vida.
El color verde del árbol simboliza la vida y la esperanza, mientras que su punta señala las alturas celestiales. En la actualidad, los árboles pueden ser naturales (pino o abeto) o artificiales, elaborados con materiales sintéticos que imitan la autenticidad de un árbol real.
Usos mágicos del Abeto
Puedes usar el abeto de varias maneras y con diferentes propósitos:
- Limpieza de casas y personas de la negatividad: Quemar aceite esencial de abeto o una rama seca, se realiza igual que la salvia y el Palo Santo. Ver aquí: Cómo limpiar tu casa de malas vibraciones
- Abundancia y la buena suerte: Colgar una rama fresca en casa promueve la renovación, la suerte y la abundancia. En rituales de luna nueva, puedes mejorar tu práctica y atraer obsequios.
- Protección familiar: Colocar una rama de abeto en casa para proteger a tu familia en especial a los bebés, atrayendo la benevolencia de los espíritus de la naturaleza.
- Protección del hogar: Si tienes un jardín, planta un abeto para proteger tu hogar y atraer cosas maravillosas.
- Para celebraciones: El abeto también utiliza para celebrar Yule durante la Navidad. Las fiestas de Yule se celebran en el solsticio de invierno: en el hemisferio norte, cerca del 22 de diciembre, y en el hemisferio sur, alrededor de 21 de junio. Esta fiesta de la familia y estuvo siempre dedicada a la fertilidad, a los solsticios y tiene sus orígenes en la Escandinavia precristiana. También se recordaba a los ancestros, los amigos ausentes.
Diferencias entre pinos y abetos
- Hojas y Conos
Los abetos tienen hojas en forma de aguja que están unidas a la rama como con una ventosa. Sus conos son pequeños cilindros, compactos, con escamas, y se mantienen erguidos en las ramas superiores. Los pinos tienen piñas que se desprenden y caen al suelo. Te puede gustar: Relación entre la Piña del pino y la glándula Pineal.
Vídeo: ACTIVA tu GLÁNDULA PINEAL: Afirmaciones para abrir tu TERCER OJO
- Descomposición de Conos
Los conos de los abetos no caen, sino que se descomponen, liberando los piñones. Las piñas se desprenden y caen al suelo.
- Pertenencia al Género
Los pinos pertenecen al género Pinus. Los abetos pertenecen al género Abies.
- Tipo y Zonas de Crecimiento
Los pinos pueden ser árboles o arbustos y crecen en zonas frías del hemisferio norte hasta las zonas subtropicales. Los abetos son árboles que pueden crecer en zonas muy frías y de montaña en el hemisferio norte.
- Características de las Agujas
Las agujas de los abetos son cortas, miden menos de 5 cm de largo y son suaves al tacto. Los pinos tienen agujas dispuestas en grupos de 2 a 8, con longitudes que van desde 2,50 cm hasta 40 cm.
- Forma del Árbol
Los pinos tienen un dosel abierto y redondeado, con una forma ligeramente triangular o irregular. Los abetos tienen una forma triangular alta.
Te puede gustar: Simbolismo del árbol de pino
Deja un comentario